domingo, 21 de septiembre de 2014

TRIUNFO BALSÁMICO

A la quinta fue la vencida. El Real Zaragoza conseguía en la tarde de ayer su primera victoria en esta temporada, después de no haber sido capaz de sumar tres puntos en ninguna de las cuatro anteriores jornadas. Por la mínima, gracias a un solitario gol de Borja Bastón, el conjunto que dirige Víctor Muñoz lograba el ansiado primer triunfo del curso, que comenzaba a antojarse más que necesario. 

Ya lo dijo el Secretario Técnico del Real Zaragoza Ángel Martín González: "Este equipo va a hacer la pretemporada compitiendo". Y así ha sido. El 26 de agosto, no hace ni siquiera un mes, llegaban al Real Zaragoza Eldin Hadzic y Albert Dorca, para dos días más tarde, aterrizar en la capital del Ebro Borja Bastón. Tres futbolistas llamados a ser importantes en este nuevo Real Zaragoza. Dos de ellos, precisamente, fueron los protagonistas en el único gol de la tarde. Asistencia magistral de Dorca, que Bastón aprovecha para, con un sutil toque con el exterior, batir al guardameta del Alavés. La entrada de Eldin tras el paso por vestuarios volvió a demostrar que se trata de un futbolista más que aprovechable esta temporada para la entidad aragonesa. Además, el futbolista bosnio ya sabe lo que es marcar con la camiseta blanquilla. Lo hizo hace dos semanas en el Mini Estadi frente al Barça "B", para empatar un partido en el que el Real Zaragoza se acabaría viendo superado en todas las facetas por el filial azulgrana. Ese partido es, hasta la fecha, la única derrota zaragocista en cinco partidos que se llevan disputados.

La realidad es más que evidente, ¿cuántos de nosotros hubiésemos firmado estar con 6 puntos y una única derrota en la quinta jornada? Quizá para los más optimistas estos no sean números que se deban permitir a todo un Real Zaragoza. Todo un Real Zaragoza que durante gran parte del verano estuvo más muerto que vivo, que gran parte de sus incorporaciones se firmaron en el tramo final del mercado de fichajes, y sobre todo, que sino llega a ser por dos errores puntuales frente a Osasuna y Sabadell, estaríamos hablando de un pleno de victorias en La Romareda. El conjunto zaragocista ha estado a un minuto en cada uno de esos dos partidos de lograr la victoria. Sin demasiado fútbol, es verdad, pero tal vez en su visita al Colombino en la primera jornada frente al Recreativo de Huelva mereció algo más que un rácano empate a cero. 

Con un joven arquero de 20 años como Óscar Whalley, que ya ha dado sobradas muestras de que está capacitado para ser el portero titular del Real Zaragoza. Con Jesús Vallejo, un central de tan solo 17 años todavía en etapa juvenil. Con un centro del campo magistral como forman Iñigo Ruíz de Galarreta, el joven talento de Lezama, y Albert Dorca. Y con un delantero que tiene gol como Borja Bastón, que ya lleva dos y una asistencia en cuatro partidos, el Real Zaragoza está capacitado, a medida que vaya engrasando sus piezas, para tratar de algún día volver a lo que nunca debió dejar de ser.

Ojalá el primer triunfo de la temporada sirva para aportar solidez al equipo, ahuyentar algunos viejos fantasmas del pasado que, parece, comenzaban a sobrevolar La Romareda y a partir de la semana que viene frente al Llagostera, el Real Zaragoza continue dando pasos en firme de cara a su pronta recuperación. 

sábado, 14 de junio de 2014

HUMILLADOS

Con las novedades de Diego Costa y David Silva en el once titular, la Selección Española arrancaba su cita mundialista en Brasil con la intención de defender la estrella conseguida en Sudáfrica hace cuatro años que le acredita como Campeona del Mundo. Holanda, ese país que Andrés Iniesta hizo llorar aquel lejano verano de 2010, volvía a cruzarse en nuestro camino, esta vez como punto de partida de un gran campeonato.
Después de la polémica victoria de la anfitriona Brasil en su debut, en esta segunda jornada del Mundial todas las miradas se centraban en la Selección que dirige Vicente del Bosque. Para esta cita, Vicente Del Bosque apostaba por mantener el bloque que ha llevado a España a lo más alto y, además, a lograr lo que nunca nadie había conseguido antes, ganar dos Eurocopas y un Mundial de manera consecutiva. Es más que evidente que el inicio de este Campeonato del Mundo para España no fue el deseado por nadie, pero lo que nadie puede nunca es dudar de un grupo de futbolistas que han dado tanto a nuestro país. Los logros del pasado no deben estar exentos de recibir una dura crítica, pero sí de la falta de respeto. Tres aspectos resultaron claves en la contundente derrota de España por cinco goles a uno frente a la renovada Selección Holandesa.
·         Silva: demasiado desapercibida ha pasado la figura del canario en estas primeras horas, siendo que él tuvo en sus botas la oportunidad de sentenciar un partido que España tenía de cara. Solo, delante del portero, el jugador del Manchester City optó por tirar una vaselina al guardameta holandés para subir el segundo gol español al electrónico. La realidad fue bien distinta. Tanto, que un minuto después el resultado ya era de empate a uno. Si se carga contra Casillas por su error en la segunda parte, de la misma manera se debería cargar contra un delantero que, de haber acertado en su ejecución, seguramente hubiera deparado un partido bien distinto para el combinado español.

·         Verbena defensiva: con la siempre sensible baja de Puyol, respecto a la última cita mundialista, Sergio Ramos y Gerard Piqué emergían como la pareja de centrales elegida por Vicente del Bosque para este Campeonato del Mundo. Lo cierto es que habría que remontarse en el tiempo para encontrar un partido tan malo defensivamente por parte de la Selección Española. La distancia entre los dos centrales era la mayor parte de las veces de casi veinte metros, algo que aprovechó a las mil maravillas Arjen Robben, incrustado gran parte del encuentro como delantero centro entre los dos zagueros españoles. El desafortunado partido de Iker Casillas, que fue objeto de falta en el tercer gol orange, hizo que el arquero del Real Madrid tuviera que sacar hasta cinco veces el balón de su portería. Incomprensiblemente ni Sergio Ramos, héroe del madridismo por su actuación en la reciente final de Champions, ni Gerard Piqué, cuya participación en el Barcelona ha generado más sombras que luces esta temporada, no pudieron parar de ninguna manera el vendaval ofensivo en el que se convirtió la selección holandesa, encabezada por un estelar Robben y un incisivo Van Persie.  

·         Louis van Gaal: el planteamiento del seleccionador holandés hizo fracasar el juego de toque que tantas veces le ha funcionado al combinado español. Nada más y nada menos que con cinco defensas, algo que Louis van Gaal nunca ocultó, Holanda fue capaz de anular durante gran parte de la segunda parte el bagaje ofensivo de la selección española. Ni Diego Costa de inicio, ni Fernando Torres ya en la segunda parte, pudieron romper el entramado defensivo establecido por el seleccionador holandés. La Selección Española tan solo fue capaz de anotar desde el punto de penalti, gracias a una pena máxima transformada por Xabi Alonso en la primera mitad.
Bajada de la nube o cura de humildad, lo que está claro es que el debut de España en el Campeonato del Mundo de Brasil ha dejado tocada a una hinchada que soñaba con volver a estar cuatros años después entre los mejores. El próximo miércoles España tendrá la reválida ante el combinado de Chile. El equipo español debe ganar para conseguir los primeros tres puntos pero, sobre todo, para disipar el pesimismo y las posibles dudas que se hayan podido generar en su entorno.