1.- Raphaël Varane: el mejor jugador de la eliminatoria, sin paliativos. El jovencísimo central francés volvió a demostrar que puede estar a la altura en las grandes citas. Elegante en la salida de balón, contundente en defensa y excelso en el juego aéreo. Volvió a marcar, otra vez de cabeza como sucediese en el partido de ida, y de nuevo a la salida de un corner. Se elevó más que nadie para sentenciar un partido que ya había encarrilado Cristiano Ronaldo. Después del partido de ayer, Varane aumenta todavía más sus opciones de volver a ser la pareja de Sergio Ramos en el centro de la defensa la próxima semana en Manchester.
2.- Cristiano Ronaldo: Superlativo. El crack portugués volvió a demostrar, esta vez en territorio comanche, el gran estado de forma en el que se encuentra. Él solito forzó un penalti, que desencadenaría en el primer gol del partido, y encarriló la eliminatoria en el segundo acto haciendo el 0-2. Por las botas del futbolista luso pasan gran parte de las opciones que tiene el Real Madrid de clasificarse para los cuartos de final de la Copa de Europa. Seguro que Ronaldo vuelve a tener un papel fundamental la semana que viene en su visita a la que fue su casa.
4. Messi: sin noticias de Leo. El crack argentino no apareció en todo el partido y su equipo lo acusó. Gran parte de culpa la tiene el sensacional marcaje que realizó sobre él Varane a lo largo y ancho de todo el partido. Lejos de su mejor versión, y después de ofrecer una mala imagen también en Champions frente al Milan, Leo Messi debe volver a recuperar su mejor nivel, si no quiere que su equipo se vea apeado también de la máxima competición continental.
6. Undiano Mallenco: venía señalado sin que todavía hubiese decretado el inicio del partido. Unas polémicas declaraciones del técnico azulgrana provocaron que sus jugadores estuviesen más pendientes de intengar engañarle, que de jugar al fútbol como nos tienen acostumbrados. Señaló un penalti clamoroso de Piqué sobre CR7, acertó en la acción que Pedro es derribado por Di Maria, y no arriesgó en ninguna de las posibles penas máximas en el área visitante. Tan solo tuvo un error. Mal colocado en una jugada de ataque del Barcelona, en la que bloqueó a un jugador culé.
En definitiva, merecido pase a la final para un Real Madrid que aprovechó una serie de errores del Barcelona en el partido de ida, que podrían haber dejaco encarrilada la semifinal. Sevilla y Atlético de Madrid, por su parte, batallarán esta noche por clasificarse para la finalísima de mayo donde ya espera el equipo de Jose Mourinho.